viernes, 2 de noviembre de 2007

Increible

Bueno, decidí volver a mi blog para esta vez tratar de referirme gestos admirables de las personas y tratar de alejarme del lado oscuro repetitivo y dramático de los post que generalmente subimos. Basta de quejarnos, al menos yo. Entrar nuevamente me produjo una sensación de volver a esa vieja casa de la infancia, abandonada, polvorienta y seca, pero encontré un post que no había leído, hecho por alguien en septiembre (creo) que me alegro bastante, alguien que no conocía y me puse a leer lo que yo había escrito, en fin me emocione. Gracias Sandra, pequeños gestos a veces son mas importantes que lo tangible, es bueno saber que existen amigos a los que no se conoce. Bueno, me quiero referir a lo que me motivo a volver a escribir: Hace un tiempo andaba yo en mi auto trabajando cerca del apumanque y lo deje estacionado con las luces intermitentes aproximadamente 20 minutos y cuando volví, me subí y el caprichoso no partió, se había descargado la batería. Resignado y lleno de rabia empecé a empujarlo en sentido contrario al del transito ya que la calle tenia una leve pendiente. mi intención era llegar hasta otra calle que se cruzaba con la en que yo iba, fue muy difícil ya que venían autos de todos lados a esa hora y yo trataba de controlarlo desde afuera por al ventana. De repente cache a uno de estos gallos que te cobran por estacionar y le pedí si me ayudaba a empujar un poco apara hacerlo partir, el loco de malas ganas me empujo un poco y nada así es que seguí bajando hasta llegar a la calle que cruzaba tratando de no quedar atravesado justo en el medio para que no me fueran a chocar, y tal fue mi suerte que justo allí quede, en el medio
del cruce. Ya a esa altura de la situación yo estaba angustiado y cansadísimo con el corazón que se me salia por la boca por el esfuerzo y empezando a desesperar, pero de pronto veo que se acerca una mina re piola de unos 27 años, mirándome, lo primero que pensé fue "no creo que me venga a ayudar" Error. Enorme fue mi sorpresa cuando me dijo "¿te ayudo?" ooopss, yo le dije gracias pero no te preocupes que es re pesado, refiriéndome al auto, y me dijo no importa yo te ayudo y me ayudo a empujarlo, le explique que estaba sin batería y me dijo que me subiera y ella empujaba, uff, no lo podía creer, pero yo le dije que se subiera ella y yo empujaba y se subió y empuje pero no partió, a todo esto ya estábamos en la calle de bajada a la cual yo me dirigía desde el comienzo. Bueno ella insistió en que ella podía empujar y finalmente me subi y ella empujo el auto y este partió. Yo estaba realmente sorprendido de que una mina piola y delgadita me haya ofrecido ayuda y me empujara el auto, me sentí mal por aceptar que ella hiciera tremendo esfuerzo y yo sentado dentro del auto, en fin le di un millón de gracias y el ofrecí llevarla pero me dijo que iba "aquí cerca". Uff me fui descolocado, pero la cago la mina buena onda, y pensar que a veces a uno le cuesta tanto hacer algún gesto mucho menor en favor de otra persona. Bueno me sirvió para darme cuenta de que no toda gente que se ve en la calle es tan prepotente y agresiva y que aun quedan buenas personas, personas admirables por ahí. Sigamos el ejemplo. Que opinan

viernes, 18 de mayo de 2007

Claridad




He decidido cambiar nuevamente el diseño de mi blog ya que ahora estoy viendo las cosas con mas claridad y creo necesario darle luz a mis palabras, siento que estoy despertando en las mañanas, jajaja. Bueno también siento que estoy desintoxicando mi mente. Saludos a todos y especialmente a quienes están por venir.

sábado, 12 de mayo de 2007


Dicen que el tiempo lo cura todo. No se, no me parece ya que mientras mas pasa el tiempo mas deudas acumulo hacia mi persona, perdón por ser auto referente y caer en el tono tristón del que siempre trato de huir pero parece que en el blog no me resulta otra cosa sino hablar de calamidades, creo que el tiempo en cierto modo me permite evaluar el presente según los recuerdos, y según eso establecer mis proyecciones o dicho de otra forma prepararme para el futuro. No se si al resto de la gente le pasa parecido pero para mi esta ecuación a mis 38 años me resulta dolorosa. Siempre recuerdo con nostalgia los momentos vividos, incluso con dolor y resignación cuando evaluó mi presente y cuando al mirar hacia delante me topo con un muro que no me deja ver que viene mas allá en el camino me y me comienzo desesperar. Realmente me carga ser un tipo pesimista e invernal, creanme que muchas veces he criticado a personas asi, pero ahora me doy cuenta de lo que siente alguien que esta cabizbajo. Yo siempre he apreciado los largos veranos y los buenos momentos, me gusta disfrutar de la vida y me conformo con poco, no quiero decir que mi vida entera sea una lata pero últimamente los balances han sido medio pesimistas. Hace algún tiempo vengo sintiendo que el nuevo día no trae nuevas ilusiones ni nuevas aspiraciones como tampoco nuevos proyectos, el día comienza tal como termina y yo vengo descendiendo. A veces me siento ajeno a la realidad cuando veo a cantidad de personas en su onda aparentemente happy, en los malls con la sonrisa de oreja a oreja desfilando estilo. Creo que no pasa de ser una pose para impresionar… o tal vez ¿estarán realmente felices?

domingo, 29 de abril de 2007

Domingo


Pase mi infancia recorriendo caminos, me doy cuenta ahora que fui como una hoja dando vueltas en el viento. Los fines de semana pescaba mi bicicleta y me arrancaba a las calles, generalmente era yo y mi imaginación que me llevaba por caminos desconocidos aun que hubiese pasado por ahí mil veces. Mi bicicleta cic y el chapulín mi perro amigo y fiel que me seguía siempre donde quiera que yo fuese. Generalmente yo me entregaba en mis caminos y me dejaba llevar por la inercia y mi imaginación. En el barrio había seudo amigos con los que a veces me topaba y hacíamos algunas cagadas como robar placas de autos u otras cosas de pendejos. Pero el típico domingo en la tarde estaban todos en sus casas y yo andaba hueviando por ahí. A veces me topaba con la Lice y nos coqueteábamos un poco a veces nos premiábamos con un beso y yo seguía sin curso definido, iba a la plaza o me arrancaba de algún cúma que me echaba la foca o echaba carrera con las micros. Llegaba a mi casa con la bicicleta media destartalada cuando ya estaba oscureciendo con sensación de angustia, pues al día siguiente era lunes y yo como siempre no había hecho mis tareas. Dentro de mi pieza me sentía como si esa hoja que daba vueltas en el viento, estuviese ahora en un tarro de basura. Allí yo ordenando mis cosas para ir al colegio al día siguiente trataba de tragarme la amargura del ocaso. Luego lentamente me incorporaba a mi familia ya reunida en casa. Los recuerdos son tan vividos que siento que si estirara las manos podría tocar a mis padres o a mi hermano. Había una dinámica increíble en el ambiente, un equilibrio exacto entre todos y todo lo que había en la casa. Todo concordaba, eran los silbidos continuos de mi padre y su música clásica, con lo que inconscientemente nos decía que estaba contento o que las cosas estaban en orden, la estufa a gas que templaba el comedor, que milagrosamente hoy la tengo en mi hogar funcionando aun que ya no juega ese papel tan fundamental que tuvo algún día, era mi mama colocando la mesa para cenar, el televisor encendido, la luz amarillenta de la lámpara del living, mi hermano sin muchos comentarios por lo general, el teléfono que sonaba siempre a esa hora cuando llamaba mi abuelita, etc. Después de un rato de estar en casa la amargura se desvanecía y yo entraba en un estado de letargo placentero y acogedor. A esa hora ya todo era como un carrusel perfectamente equilibrado, yo me sentía tranquilo y protegido como en una cuna, luego cenábamos, veíamos las noticias en la tele y después Starky & Hutch hasta que llegaba el momento de ir a dormir envuelto en esa increíble la sensación de tranquilidad con que terminaba el fin de semana. Al día siguiente sería lunes nuevamente y otra nueva historia comenzaría, muy desagradable por lo demás.

jueves, 26 de abril de 2007


Hoy me cuesta hablar, solo siento cosas, creo que no todo es tan difícil, siempre la existencia te da nuevas chances, no digo que sea una segunda oportunidad, puede ser la tercera o la cuarta o la quinta. No creo que se trate de esa segunda oportunidad como si después de eso no hubiese vuelta atrás, yo creo que las oportunidades no se agotan, pienso que siempre se va abrir alguna ventana más por ahí. Todo depende de uno. Hay que querer hacerlo y buscar la forma de lograrlo.

domingo, 22 de abril de 2007

Felicidad


Felicidad, una palabra manoseada en todos los tiempos, todo el mundo habla de felicidad, de quien la tiene o quien no la tiene, quien lo es o no lo es, pero alguien me podría explicar ¿QUE ES FELICIDAD? Alguna vez escuche que frio es la ausencia del calor, ¿será que felicidad es ausencia de tristeza?, ¿Cuándo alguien se puede autodenominar feliz? ¿Que parámetros existen para definir esta fundamental condición humana? Yo vengo preguntándomelo hace mucho tiempo, lo más cercano a una conclusión que he llegado al respecto es que la felicidad es un estado de conformidad, tal vez de saber que lo que vez es lo que hay. Existe además la necesidad de sentir plenitud para lograr dicha conformidad, quizás este sea el aspecto clave, el simple impulso.